– Hola, Arturo, ¿puedo verte? – Hola, Alejandro, ¿estás bien? ¿Qué ha pasado? – Necesito platicar, no están bien las cosas. – Ven a mi consultorio y platiquemos mañana por la mañana. Colgué el teléfono. Suspiré. Afuera de mi auto todos parecían felices. Era un día soleado, para todos menos para mí. Llevaba media hora […]